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Fases de la Luna y su influencia sobre las personas y la Tierra: lunáticos, agricultura, rituales olvidados y más datos fascinantes

En algunas culturas, la Luna es venerada y en otras es tan solo un satélite natural, que ilumina a la humanidad. Aprender sobre las fases de la Luna y su influencia permite que cada persona pueda estar preparada para cualquier cambio en su vida. Por ello, es necesario compartir información sobre la Luna y sus fases.

Efecto de la luna sobre las personas

Está más que demostrado que las fases de la Luna influyen en los siguientes aspectos:

  • En el comportamiento de las personas que tienen problemas de salud mental.
  • En la reproducción de los animales.

La Luna es la compañera fiel de la Tierra y el objeto celeste más fácil de encontrar en el cielo nocturno. Durante siglos, este satélite natural y el modo en que el efecto lunar influye sobre el comportamiento humano, han estado en el centro de la mitología y el folclore de todo el mundo.

En algunas culturas, es venerada y adorada por su lugar entre las estrellas. Pero también, hay historias misteriosas sobre relatos de hombres lobo, cuya transformación depende de la luna llena.

Todas las fases de la Luna forman parte de lo que son los ciclos astrológicos. Estos son los patrones recurrentes que muestran la posición de los cuerpos celestes. A continuación, se explica detalladamente sobre el ciclo lunar.

Información sobre la Luna y sus fases

Noche tras noche, los habitantes de la Tierra ven cómo la luna cambia la cara que le muestra al planeta. A estos cambios se les conoce como la actividad en las fases de la Luna.

Durante siglos las personas se preguntaron a qué se deben las fases de la Luna y gracias a los astrónomos se obtuvo una respuesta. Las mismas se dan debido a la posición del astro, que cambia con respecto a la ubicación de la Tierra y el Sol.

Como resultado de la investigación de las fases de la Luna, se descubrió que este satélite natural no posee luz propia, es el sol quien lo ilumina. Fue entonces, cuando los expertos explicaron cómo son las fases.

Mientras la luna gira alrededor de la tierra, los habitantes del planeta pueden observar su parte brillante creando lo que son las fases de la Luna. Los astrónomos determinaron cuáles son las fases de la luna y le dieron una serie de nombres.

A continuación, se explica un poco más sobre lo que son las fases de la Luna y su influencia:

Infografía con las fases de la Luna y su influencia con respecto a la posición de la tierra.
Ciclo completo de la luna (of the additions: Eric Gaba (Sting – fr:Sting)de la traducción Ortisa, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons / recorte, mejora de tono y resolución de la original)

Luna nueva

Durante esta fase, la Luna está entre la Tierra y el Sol, por ello, desde la Tierra se puede observar su parte no iluminada. Durante este ciclo, el satélite natural se vuelve prácticamente invisible en el cielo. Desde el planeta solo se puede ver esta fase de la Luna durante un eclipse solar.

Ejemplo de luna nueva, donde casi no se puede apreciar al astro.
Ejemplo de luna nueva, donde casi no se puede apreciar al astro (NASA Goddard Space Flight Center, CC BY 2.0, via Wikimedia Commons / recorte, mejora de tono y resolución de la original)

Cuarto creciente

Las fases de la Luna creciente se dividen en dos: Cuarto creciente y Luna gibosa creciente. La primera se da cuando el Sol ilumina una pequeña superficie del satélite. Entonces, la Luna entra en una fase conocida como cuarto creciente, donde menos de la mitad se ve llena.

Pasos desde el cuarto creciente hacia la luna llena.
Luego de pasar la luna nueva, el astro comienza a mostrar cada vez más luz hasta la luna llena (DamiánAndrade, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original)

Primer cuarto

A medida que aumenta el porcentaje iluminado de la Luna, los habitantes de la Tierra pueden percibir su siguiente fase, en la que la mitad del satélite se ve iluminado.

Luna gibosa creciente

La fase creciente tiene otra etapa cuando aumenta la superficie iluminada del satélite natural y más de la mitad se ve lleno. Se dice entonces que se encuentra en la fase de Luna gibosa creciente. La palabra “gibosa” proviene del latín y su significado es “joroba”. Este término se ha utilizado por mucho tiempo para describir formas redondas o convexas.

Luna llena

Cuando la Luna se halla ubicada detrás de la Tierra con respecto al sol, y su cara está completamente iluminada, es cuando se dice que la Luna está llena. Durante este período se pueden observar eclipses lunares desde el planeta.

Principal diferencia entre fase nueva y llena: la diferencia radica en que, en la nueva, el astro brilla en todo su esplendor e ilumina a la Tierra durante las noches y en la llena no.

Un estudio que se llevó a cabo en el hospital de Fukutsu de Japón, entre enero de 1996 y marzo de 2007, reveló que el número de partos nocturnos incrementó en ese país, debido a los efectos de la Luna llena.

Luna gibosa menguante

En esta fase, la parte iluminada del satélite natural visible desde la Tierra comienza a menguar. Cuando es cuarto menguante, la superficie del satélite, que se puede ver desde el planeta, sigue mayormente iluminada. Esta es una de las principales características de la Luna menguante.

Todas las fases de la luna menguante.
Ciclo menguante que inicia luego de la luna llena, donde el astro va perdiendo poco a poco su brillo (DamiánAndrade, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons / recorte, mejora de tono y resolución de la original)

Último cuarto

Es similar a la fase del primer cuarto, solo que en esta etapa, la mitad iluminada que da la cara a la tierra, es la que no era visible antes.

Cuarto menguante

Creciente y menguante son fases parecidas, porque, desde la Tierra, solo es visible una pequeña porción del satélite natural.

La fase final del ciclo ocurre en el momento en el que el astro se acerca a la próxima Luna nueva. Cuando es cuarto menguante, solo se aprecia una parte del satélite, antes de que vuelva a desaparecer en la oscuridad.

Un dato curioso sobre este tema, es que, de las fases lunares: julio, agosto y septiembre son los meses en los que la Luna llena, el cuarto menguante, la Luna nueva y el Cuarto creciente, son las protagonistas. Porque, se pueden ver las fases más fácilmente en diversas partes del mundo, debido a la temporada de verano y sus cielos despejados.

Con relación a los efectos de la luz del astro menguante en las personas, se puede destacar la creencia que tienen muchos de que no es bueno cortarse el cabello en esta fase, debido a que se dice que el mismo crece más lento.

Otra de las creencias sobre la fase menguante es que se dice que es un buen momento para la toma de decisiones, debido a que los pensamientos negativos disminuyen en este período.

Calendario lunar y la Luna nueva

El calendario lunar se emplea para medir y calcular el tiempo siguiendo los ciclos de la Luna. Generalmente, se usa la Luna nueva como guía para iniciar el mes en los calendarios lunisolares.

Muchos se preguntan cuántos días tiene el calendario de este astro. La respuesta es muy simple: 354 días, 8 horas y 48 ​​minutos.

El debate sobre la influencia de la Luna en las personas es muy diverso. Algunos consideran que sí afecta el comportamiento del ser humano, mientras que otros aseguran que solo es una creencia.

Durante el XV los investigadores consideraban que un individuo podía ser más o menos agresivo, dependiendo del ciclo donde se encontraba la luna en ese momento. A partir de ese momento fue donde se empezó a hablar sobre el término de locura.

Los lunáticos (la Luna y la locura)

Durante mucho tiempo se ha pensado que la luna puede afectar al estado de ánimo de los individuos, llegando a considerarlo como una persona lunática.

El filósofo Aristóteles y el historiador Plinio el Viejo afirmaron esta hipótesis, alegando que, como el cerebro es el órgano del cuerpo más húmedo, sí puede verse afectado por la influencia gravitacional de la Luna.

La palabra “lunático” viene del nombre de la diosa romana llamada Luna y es un término que se sigue utilizando en la actualidad, porque si una persona tiene un comportamiento extraño se suele denominar como “lunática”.

La relación entre las fases de la Luna y el estado de ánimo

La creencia de que los poderes míticos de la luna llevan a las personas a tener comportamientos extraños o que durante sus diversas fases los homicidios, suicidios e ingresos a hospitales incrementan, se mantiene en pleno siglo XXI.

Diversas encuestas han revelado que un gran porcentaje de estudiantes universitarios considera que los individuos influenciados por la luna son más propensos a tener comportamientos extraños.

Aunque hay que seguir investigando sobre este tema, un estudio realizado en un grupo de 17 personas con trastorno bipolar, reveló que la luna sí influye en los pacientes que tienen este padecimiento.

Los especialistas descubrieron que sus pacientes pasaban rápidamente de estados de depresión a manía, y que estos ciclos no eran aleatorios, sino que estaban sincronizados con el ciclo lunar. Aunque se desconoce el mecanismo exacto, se piensa que esos rápidos cambios de humor se debían a una alteración del ritmo circadiano y del ciclo del sueño.

Cuando se investiga información relacionada con el influjo de la Luna sobre las personas, PDF es uno de los formatos más recomendados para guardar estos documentos.

La Luna y su efecto sobre la biología reproductiva en personas y animales

Las investigaciones sobre los ciclos reproductivos de peces y otros animales marinos han demostrado que algunos de ellos migran y desovan según el ciclo lunar y que algunas especies aumentan su actividad reproductiva durante la luna llena, cuando la luz de la luna es más brillante. Pero estas mediciones no están tan claras cuando se trata de los seres humanos.

Aunque diversos estudios científicos han demostrado que hay muchos factores internos y externos que pueden influir en la ovulación, el embarazo y el parto, es necesario investigar más para determinar el efecto exacto que puede tener el ciclo lunar en las tasas de natalidad, porque las hipótesis que existen son contradictorias.

Las palabras calendario y embarazo, siempre están presentes en la vida de las mujeres, porque ambas están relacionadas con el ciclo reproductivo. Las féminas suelen revisar con frecuencia sus calendarios menstruales, para así saber cómo va su ciclo ovulatorio.  En algunas etnias existe la creencia popular de que el calendario menstrual y los cambios de la luna pueden estar relacionados.

Entre enero de 1996 y marzo de 2007, un hospital de Fukutsu, en Japón, llevó a cabo un análisis de nacimientos y reveló que hubo un mayor número de partos nocturnos en torno a la luna llena y un mayor número de partos diurnos en torno a la luna nueva.

Sin embargo, en otro estudio de 23.689 nacimientos entre 1810 y 1929, no se halló ningún patrón ni correlación entre el ciclo lunar y la frecuencia de los alumbramientos.

La Luna, las mareas y el campo magnético

La distancia que hay entre la Luna y la Tierra es de 385 mil kilómetros de distancia y ambas ejercen fuerza gravitatoria la una sobre la otra.

Debido a que el satélite natural posee una órbita elíptica, la fuerza gravitatoria que ejerce sobre el planeta depende de la distancia a la que se encuentre.

Cuando la Luna está más cerca de la Tierra, la fuerza que genera en las mareas es un 20 % mayor. Lo que implica el incremento de unos diez metros en los niveles de agua de las superficies más cercanas al satélite.

Por el contrario, cuando la Luna está más lejos de la Tierra, su fuerza gravitatoria es un 20 % menor, lo que ocasiona que los niveles de agua se normalicen.

Sin la influencia de la Luna en las mareas, la vida animal tendría que adaptarse rápidamente. La zona intermareal es una franja del océano en la que prosperan determinadas especies. Sin la fuerza gravitacional de la Luna, se estrecharía esa franja. Esto aumentaría la competencia entre las especies, poniendo en peligro su supervivencia.

Los seres humanos igualmente se verían afectados con mareas más débiles. Por ejemplo, las personas que practican el surf podrían ser testigos del fin de este deporte.

Además del viento, las mareas entrantes empujan mayor cantidad de agua hacia las playas, lo que genera olas de mayor tamaño. Sin la influencia de la Luna, los surfistas más arriesgados tendrían que decirle adiós a las olas gigantes.

El satélite natural también parece tener influencia sobre el campo magnético de la Tierra. Este fenómeno se produce por la geodinámica, que no es otra cosa que el movimiento de una aleación de hierro líquido en el núcleo del planeta.

El modelo científico clásico asegura que la Tierra se ha enfriado unos 3.000 °C en los últimos 4.300 millones de años, para que exista el campo magnético. Sin embargo, estudios geoquímicos recientes del planeta no apoyan esta teoría.

Investigadores han sugerido que la Luna podría influir en el campo magnético de la Tierra. Los efectos de las mareas provocados por el satélite natural, también deforman el manto del planeta.

Se cree que esto podría estar simulando el movimiento de la aleación de hierro líquido que se halla en el núcleo de la Tierra. Lo que a su vez generaría y mantendría el campo magnético.

Además, algunos consideran que este efecto de la Luna sobre el planeta, también podría estar contribuyendo al desarrollo de grandes fenómenos volcánicos.

La Luna en los rituales antiguos

Es fascinante ver cómo se ha debatido sobre el tema de la luna en la mitología y en la cultura a lo largo de los años. Aunque hoy en día la ciencia lo considera como un mito sin fundamento, mucha gente opinaba, y algunos todavía lo hacen, que la luna llena puede influir en que una persona se vuelva loca.

La creencia de que este satélite natural puede afectar negativamente a los pacientes psiquiátricos ha sido especialmente fuerte entre los especialistas de la salud mental. De hecho, hay estudios que comprueban que este tipo de hipótesis con las personas que padecen un trastorno bipolar sí son ciertas.

De igual forma, las civilizaciones antiguas han visto a menudo a la luna como un símbolo de fertilidad. Se creía que la luna determinaba cuándo una mujer podría quedar embarazada. Sin embargo, la ciencia moderna ha encontrado pocas pruebas que respalden tales afirmaciones.

En la mitología griega, la diosa Selene es la personificación de la mujer y Luna. Ella era hermana de Apolo, el dios del Sol. También se la ha llamado Hécate y Artemisa, y se la consideraba una de las divinidades más poderosas. Pero no existía ningún templo dedicado a Selene.

Un calendario de diseño antiguo que data de 1660 con las fases de la luna.
Diseño antiguo de las fases de la luna de 1660 (Andreas Cellarius, Public domain, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original)

Esto se debía al hecho de que la luna puede ser vista y venerada desde cualquier lugar. Durante las fases de la Luna llena y la luna nueva, se la invocaba en busca de guía y gracia.

Aunque en muchas culturas la luna se ha considerado una deidad femenina, en otras se la ha representado como una figura masculina. En un pueblo de Kenia llamado luyia, el sol y la luna eran hermanos.

La luna era más grande, más brillante y el sol estaba celoso de la luna. Los dos se pelearon y lucharon y la luna cayó al barro y perdió gran parte de su brillo. Dios intervino entonces y detuvo la pelea. Para mantener a los dos separados, al sol se le permitió brillar durante el día, y a la luna, con sus marcas (por haber sido salpicada por el barro), se le permitió reinar por la noche.

Por otra parte, los egipcios adoraban a un Dios masculino de la luna llamado Khonsu. Este Dios Khonsu era también la deidad del tiempo y la fertilidad. Los antiguos egipcios creían que Khonsu protegía a los viajeros durante la noche, y a menudo se le invocaba para pedirle ayuda en la curación. Se considera que Khonsu bendice a las personas con una mayor virilidad y las protege contra los animales salvajes.

Mientras que, en el hinduismo, la luna se ha asociado con las deidades védicas Soma y Chandra. Para los hindúes, la luna tiene un gran significado. Representa la creación, la vida y la existencia mortal. También adorna la cabeza del gran dios hindú Shiva.

Curiosamente, algunas culturas no veían la luna como una deidad benévola. Los aztecas de México la llamaban Mictecacuiatl y creían que recorría los cielos nocturnos en busca de víctimas que consumir. Los nativos de Nueva Zelanda se referían a ella como la “devoradora de hombres”.

En muchas de estas culturas, la luna era venerada a través de diversos medios y rituales. La gente realizaba diferentes ritos según la fase de la luna.

En la actualidad, cuando la gente quiere cortarse el cabello, busca información en las redes sociales sobre las fases de Luna: agosto, septiembre y octubre, son los meses del calendario lunar en los que los estilistas recomiendan probar con un cambio de look.

La Luna y la agricultura

La creencia de que las fases de la luna tienen influencia sobre el ritmo de crecimiento de las plantas es muy antigua y está extendida por todo el mundo.

Desde hace cientos de años varios expertos han tratado de comprobar la veracidad de la influencia de la Luna en las cosechas, pero no han tenido éxito.

Sin embargo, esto no ha impedido que en muchas culturas se usen diversos métodos basados en la creencia de que el satélite natural puede ayudar a obtener mejores cultivos

Los partidarios de esta teoría piensan que el agua que se halla en el suelo y en las plantas, se ve afectada por la atracción gravitatoria de la Luna, al igual que sucede con las mareas oceánicas. De acuerdo a esta teoría, las semillas también absorberán más agua durante las fases de Luna nueva y llena.

Para obtener mejores resultados, los agricultores siembran sus cultivos dependiendo de la fase de la Luna.

En el caso de los cultivos aéreos, estos deben plantarse cuando la Luna está creciente. Durante la Luna nueva es el mejor momento para sembrar plantas de hoja verde como lechuga, espinaca, y apio. Por su parte, la fase del primer cuarto es buena para frutas y alimentos con semillas externas.

En cuanto a los cultivos subterráneos o de raíz, se dice que crecen mejor cuando la Luna está en fase menguante. Asimismo, cuando pasa la Luna llena es el momento ideal para sembrar tubérculos, como patatas, remolachas y nabos. Finalmente, durante la fase de cuarto menguante, es mejor evitar la siembra.

Como resumen de las fases de la Luna, se puede destacar que consta de ocho fases previamente explicadas en este artículo. Cada una de ellas, tiene un impacto sobre el planeta y sus habitantes. El tema de las fases de la Luna y su influencia en las personas ha permanecido vigente a través de los años. La gente nunca pierde el interés de obtener información sobre la Luna y sus fases, para así satisfacer su curiosidad sobre este interesante tópico.

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Alana Jugador
Alana Jugador
Licenciada en Comunicación social, especializada en periodismo impreso por la Universidad Arturo Michelena de Valencia. Locutora, productora y experta en SEO de contenidos.
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